Nos sentimos orgullosos, de que en tan pocos años de trayectoria, desde que nació Progreso, hayamos aportado nuestro granito de arena para mejorar la eficiencia energética y la recuperación de algunos edificios con serios problemas de conservación, reciclándolos para que sigan activos muchos años más en un estado sano, mejorando la habitabilidad y confort de los residentes, y contribuyendo, además, a reducir la emisión de agentes contaminantes a la atmósfera.
Queremos seguir aportando más granitos de arena a esta labor, y gracias a futuros proyectos que tenemos pendientes, para la rehabilitación y adaptación de los edificios a una mejora energética, y al apoyo de todos vosotros, lo lograremos, por una ciudad más conservada y un planeta más limpio.